Arquitectos:
- Edgar Delgado Spiritu
- Amaranta Guzmán Jiménez
El fenómeno social que ocurre en un barrio de la ciudad de México es comparado al comportamiento de una gran familia. Para algunas personas, es el recuerdo de los eternos amigos de la infancia o las posadas; aspectos que indudablemente evocan la convivencia de las personas de una fracción de la ciudad.
El análisis de la concepción de formas regidas por calles en el contexto inmediato, lleva a la reflexión de que los ejes formados en ese fragmento específico de la ciudad son únicos.
Traduciendo esta conclusión a concepto, el espacio proporcionado para el desarrollo del pabellón, se trazan una serie de ejes exclusivos de los vértices y colindancias del jardín, obteniendo un resultado que evoque la esencia de un barrio de la Ciudad de México.
Esta formación espacial promueve la relación entre las personas que vivan el espacio. De una manera obligada, por medio de la conexión que crean las terrazas todos los seres que habiten se encontraran continuamente. Este suceso es la más importante aportación que el pabellón le dará a las personas que lo visiten, el inevitable vínculo.
En base al principio fundamental del concepto se crean una serie de ejes inconcebibles en otro espacio. Un analisis de las ventajas y desventajas de cada uno de los espacios resultantes de los ejes, lleva a la elección estrategica de algunos en base a los apectos fisicos naturales que influyen sobre ellos y las areas de cada uno.
Las distintas alturas de cada volumen están resueltas deacuerdo a los lineamientos establecidos Las pendientes fusncionan previendo las repercusiones de los cambios de estacion a lo largo del año.